Los que hacemos pan en casa necesitamos indiscutiblemente de un horno. No importa si es a gas o eléctrico, lo importante es conocerlo bien para sacarle el mejor partido y que nuestro pan tenga un horneado óptimo. Por supuesto que la receta, el formado y la fermentación de la masa es importante, sin embargo, la etapa final, que es el horneado, es fundamental para obtener una corteza crujiente y una miga suave y esponjosa. Para tener certeza de que la temperatura que indica el horno y la temperatura que realmente tiene en su interior es igual, nosotros preferimos utilizar un termómetro adicional, ya que por experiencia sabemos que no todos los hornos funcionan de la misma manera.